En la liturgia católica, los vasos sagrados son objetos físicos consagrados o bendecidos, destinados exclusivamente al culto divino, especialmente para la celebración de la Eucaristía. Tienen un profundo significado simbólico y deben ser tratados con gran reverencia.
🕊️ Vasos Sagrados en la Liturgia Católica
Los vasos sagrados son utensilios litúrgicos usados principalmente para contener el Cuerpo y la Sangre de Cristo durante la Santa Misa. Están hechos generalmente de metales nobles y deben ser consagrados o bendecidos por un obispo o sacerdote autorizado.
🏆 Principales Vasos Sagrados
Vaso Sagrado | Uso principal | Descripción breve |
---|---|---|
Cáliz | Contiene el vino consagrado (la Sangre de Cristo) | Copón con base ancha y cáliz profundo, símbolo de la Pasión y el sacrificio. |
Patena | Sostiene el pan consagrado (el Cuerpo de Cristo) | Plato delgado y dorado que se coloca sobre el cáliz o sobre el altar. |
Copón (Ciborium) | Conserva las hostias consagradas en el sagrario | Recipiente con tapa, parecido al cáliz pero más ancho, usado para la reserva eucarística. |
Custodia (Ostensoir) | Exhibe la hostia consagrada para adoración | Vaso con forma de sol radiante que permite ver la hostia, usado en exposiciones y procesiones. |
Píxide | Transporta la Eucaristía fuera de la misa | Pequeño recipiente cerrado, usado para llevar la comunión a enfermos o ausentes. |
Naveta | Contiene el incienso | Pequeña vasija con tapa, acompaña al incensario. |
Incienso e incensario (turíbulo) | Quema el incienso litúrgico | Utilizado para incensar el altar, el Evangelio, el sacerdote y la asamblea. |
Ampollas | Contienen el vino y el agua antes de la consagración | Dos pequeños frascos de vidrio o metal usados durante el ofertorio. |
Lavabo y aguamanil | Para el rito de purificación de las manos del sacerdote | Bandeja y jarra con agua, símbolo de purificación interior. |
📜 Normas importantes
- Deben ser de material noble (oro, plata o metal con baño interior).
- Usados exclusivamente para el culto.
- Después de su uso, deben ser purificados adecuadamente por el sacerdote o diácono.
- Su bendición está regulada por el Ritual Romano.